Una
vez pasado el invierno, el virus de la gripe parece desaparecer, y con suerte nos
olvidaremos de ella hasta el mes de octubre o noviembre. Ahora con la primavera, los
rayos de sol predominan en los días, que poco a poco se van haciendo más largos,
los árboles vuelven a tener hojas, florecen las plantas, y... aparece el polen, es
decir, la primavera nos trae otro tipo de molestias, como son las alergias. Es
una época en la que el asma, la rinitis, los ojos llorosos, la garganta reseca
y los estornudos empiezan a acompañar a muchos de nosotros, y como
contrapartida aparecen los antihístamínicos, los inhaladores y los kleenex.
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Está
claro que las alergias no son exclusivas de la primavera, pero sí que es cierto
que es en esta época en la que el número de alérgicos se multiplica. En mi caso, soy un alérgico tardío, ya que no tuve ningún síntoma hasta pasados los treinta años, y se ve que como llegué tarde a esto de las alergias, pues la pillé con ganas y tengo alergia y asma todo el año, por lo que la llegada de la primavera no me
afecta más. Mi alergia es muy leve, y con un antihistamínico a
diario, evito los estornudos, los ojos llorosos y el moqueo. El tema del asma
es distinto, viene cuando quiere, no tiene un patrón fijo, y es una sensación
bastante angustiosa, normalmente empieza con una tos seca y unos silbidos en el
pecho cuando respiro, a partir de ahí siento que por más que inspiro, no
consigo el oxígeno que mis pulmones demandan, así que me toca tirar de una
dosis de Seretide para volver a la normalidad. Por suerte a día de hoy nunca me
ha dado asma mientras entreno o corro, en cambio sí he tenido síntomas de asma
sentado en el sofá o tumbado en la cama.
Mi
caso, por lo tanto no es preocupante, nuca me ha impedido salir a correr, pero
hay personas a las que los síntomas de sus alergias no son tan llevaderos y
tienen que cambiar su rutina de salir a la calle por correr en cinta, hacer
ejercicios en interior o incluso parar sus entrenamientos, también hay otras
personas a las que los estornudos, los ojos llorosos o el moqueo, no les impide
seguir con su rutina de carreras o entrenamientos.
Sin
duda, para los que hemos estado corriendo al aire libre durante los duros meses
de otoño e invierno, tener que encerrarte ahora en un gimnasio para correr es
bastante frustrante, pero también es indudable que correr con los síntomas de
la alergia no es lo más agradable, aunque esto no quiera decir que sea
imposible, pero ¿qué se puede hacer para no abandonar nuestra rutina y no tener
que cambiar el correr al aire libre por los espacios cerrados?, a continuación
os dejo una serie de consejos.
- Lo
primero es ser consecuente, la alergia no te impide correr, pero si hará que no
te encuentres al 100%, por lo que tus entrenamientos deberán ser menos
exigentes.
- Si tu
alergia te produce asma, recomiendan que tomes una dosis de tu inhalador antes
de salir a correr. En mi caso debo decir que esto rara vez lo he hecho, solo en
carreras esporádicas en las que me he visto algo nervioso, previniendo de esta
forma que los nervios se traduzcan en un ataque de asma. Si es recomendable
llevar a mano tu inhalador por si acaso…
- En
estos casos es fundamental realizar un buen calentamiento, de esta forma
ayudaras a tu cuerpo a marcar el ritmo respiratorio.
- Evita
correr si el ambiente está muy seco, y sobre todo evita correr por lugares
donde haya un mayor nivel de polen como son los parques y zonas ajardinadas.
Asúmelo, tendrás que correr más por el asfalto. Si no puedes evitar estos
lugares o correr en días secos, puedes utilizar una mascarilla para evitar que
los factores alérgenos entren en tus vías respiratorias.
- Si has
tenido un día duro y estás cansado, es mejor dejar el entrenamiento para otro
día, ya que la fatiga disminuye nuestras
defensas, y estaremos más expuestos a los síntomas de la alergia.
- Si la alergia
te ataca a los ojos, unas gotitas de suero y unas gafas de sol te serán de
ayuda.
- Al
amanecer o al atardecer es cuando mayor concentración de polen hay, por ello
deberías evitar correr a esas horas.
- Los
días primaverales de lluvia son los mejores para salir a correr si eres
alérgico, tanto mientras llueve como después de llover.
- Por el
contrario los días de viento deberías evitar salir a correr, ya que éste esparce
el polen y provocará que las vías respiratorias se vean más afectadas.
- Si ves
que te agotas demasiado o que tienes pitos al respirar, debes dar por terminado
tu entrenamiento, pero realizando una vuelta a la calma de forma pausada, no
parando de golpe.
- Una
vez terminado el entrenamiento o carrera, es muy importante darse una ducha y
cambiarse de ropa, la cual irá directamente a la lavadora.
Estos
son unos consejos que pueden ayudarnos a correr al aire libre, a pesar de que
seamos alérgicos, pero como siempre os digo en estos casos, lo importante son
vuestras sensaciones, que el entrenamiento lo hagáis con cabeza, y sobre todo
que si sentís síntomas alergénicos visitéis a vuestro médico o especialista, que
será quien os podrá hacer un diagnóstico y recetar si fuese necesario los antihistamínicos
o inhaladores necesarios.
Consejos que me vienen como anillo al dedo... ¡Malditos alérgicos! :D
ResponderEliminarCuídate esa alergia, por leve que sea. Yo ando con medicamentos, la mía es algo más fuerte.
¡Fuerte abrazo! :)
La verdad que el tema de las alergias es un rollo, por poco que afecten... en mi caso Ebastel todas las noches, y el Seretide para el asma siempre va conmigo... que se le va a hacer, no queda otra.
EliminarCuídate también de tu alergia. Un abrazo!!