lunes, 30 de septiembre de 2019

Chicago, mi tercer major. Duodécima semana de entrenamiento

No hay duda, que lo más importante dentro de un plan de entrenamientos es ir cumpliendo con lo que nos va marcando el plan para cada entrenamiento, y de esta forma intentar llegar al día del maratón en las mejores condiciones para lograr alcanzar nuestro reto. Pero aparte de esos entrenamientos, debemos ser conscientes que existen otras variables que pueden afectar a nuestro cuerpo, y ahí entra en juego el descanso y los cuidados de nuestros músculos. En mi caso esta semana, ha tocado darle un extra a mis músculos, en lo que a cuidados se refiere.

 
Normalmente, suelo darme un masaje de descarga antes de empezar el plan de entrenamientos, pero en esta ocasión decidí cambiar, y dármelo durante el plan de entrenamientos, entre la semana once y la doce, siendo finalmente este martes cuando acudí a mi fisio para darme el masaje de descarga, que tanto necesitaban mis piernas. 

Darme el masaje, supone “perder” dos días de la semana, uno el día del masaje, y el segundo el día posterior, que tengo los músculos tan doloridos, sobre todo los gemelos, que hasta al andar noto molestias, por lo que cuando me doy el masaje, sé que esa semana se va a ver trastocada en cuanto a días de entrenamiento. Además de eso, esta semana tuve que añadir que el lunes fue el cumpleaños de mi sobrina/ahijada, por lo que ese día tampoco pude hacer nada. 

Con todo ello, esta semana me encontré siendo jueves, y sin haber hecho ninguna sesión de entrenamientos del plan, por lo que me tocó reestructurar todo un poco, haciendo las sesiones jueves, sábado y domingo, e incluso cambiar la sesión de series por algo más ligth, y sumándole ejercicios de fortalecimiento y core en el gimnasio, buscando siempre no cargar en exceso las piernas. 

Y ahora paso a contaros los entrenamientos de esta semana. 

Día 1.12- 12 kilómetros de rodaje entre 5´55” y 5´20”. 

Como no iba a hacer la sesión de series, esta sesión de rodaje decidí no hacerla tan suave, meter algo más de ritmo, y aunque fuese un rodaje, llevar ritmos más exigentes. 

De los 12 kilómetros del entrenamiento, primero hice 2 kilómetros por mi cuenta a un ritmo más tranquilo, para posteriormente unirme al entrenamiento de Adidas Runners, y hacer los otros 10 kilómetros, ya a un ritmo más fuerte. 

 
Día 2.12- Calentamiento 2 kilómetros, series 5 x 2000, enfriamiento 1 kilómetro. 

Cambio de planes, dejaba de lado la sesión de series, y la cambiaba por un rodaje en el que salieron 14 kilómetros a ritmo suave. 

Tras esta sesión de rodaje, estuve haciendo ejercicios de fortalecimiento de piernas, en maquina, y ejercicios de core y estiramientos. 

 
Día 3.12- 18 kilómetros, ritmo progresivo, 4 kilómetros entre 5´20” y 5´55”, 10 kilómetros entre 5´05” y 5´20” y 4 kilómetros entre 5´y 5´05”. 

Para esta sesión quedé con tres compañeros de Adidas Runners, que están preparando el Maratón de Valencia, ellos también tenían que hacer 18 kilómetros, por lo que quedamos para hacerlos juntos por la Casa de Campo y Madrid Río. 

Durante todo el entrenamiento me noté bastante cómodo, con un ritmo en el que no notaba la carga de los días anteriores, e incluso hablando, lo cual hizo que el entrenamiento se pasase volando, y cuando nos dimos cuenta ya lo habíamos acabado. Y lo mejor de todo es que el entrenamiento estuvo dentro de los ritmos marcados por el plan. 

 
Dos semanas quedan para verme en la línea de salida del Maratón de Chicago, estoy en ese momento en el que ya solo pienso en no tener ninguna molestia ni lesión, y deseando verme en la línea de salida, y poder disfrutar de mi tercer major. 


miércoles, 25 de septiembre de 2019

XXXI Medio Maratón de Valladolid

Cuando preparo un plan para un maratón, siempre intento incluir tres semanas antes del maratón, un entrenamiento con dorsal en un medio maratón, para testear como van asimilando las piernas la carga de entrenamientos, ver como voy de ritmo y, aunque no sea 100% fiable, sacar conclusiones de cara al maratón. Y en esta ocasión el medio maratón elegido, fue el de la ciudad de Valladolid, que es justo tres semanas antes del maratón de Chicago. 

 
El Medio Maratón de Valladolid, consta de dos modalidades, una carrera de una legua, que toma la salida antes, y el medio maratón que consta de dos vueltas al circuito, más una vuelta al Campo Grande, para completar la distancia de 21,097 metros. 

La retirada del dorsal, para las personas que no eran de Valladolid, se podía retirar hasta momentos antes de la carrera, pero en mi caso, como fuimos el sábado, para hacer algo de turismo, aproveché la mañana del sábado, para retirar el dorsal y la bolsa del corredor, donde venía la camiseta. Feria del corredor como tal no había, ya que se trataba únicamente de un mostrador, donde te hacían entrega de todo. 

El recorrido, como os he comentado antes, era un circuito homologado por la RFEA, al que había que dar dos vueltas, un circuito urbano, prácticamente llano, y por zonas amplias y largas rectas, en alguna ocasión de ida y vuelta, y donde la mayor “dificultad” era un doble paso por debajo de un puente de la N-601, que suponía una bajada y una subida de bastante inclinación. 


Recorrido Medio Maratón Valladolid
A esta carrera, como he indicado anteriormente me desplacé el sábado, junto a mi mujer y el peque, para aprovechar y hacer algo de turismo, y para la carrera quedé con un compañero de Adidas Runners, que aunque vive en Madrid, es de Valladolid, y claro iba a hacer el medio maratón de su ciudad. 

Mi compañero tiene mejor ritmo que yo, pero como tiene previsto hacer el Maratón de Berlín el próximo 29 de septiembre, no tenía intención de hacer el medio maratón a un ritmo fuerte, por lo que decidió acompañarme a mí, ya que aunque él tenía en mente hacerlo a un ritmo de 5 min/km, y mi idea era de hacerlo entre 1h40´ y 1h43´, lo que suponía un ritmo entre 4:44 min/km y 4:53 min/km, lo que le suponía un nivel de “exigencia” que a él le venía bien. 


Altimetría Medio Maratón Valladolid
La salida, se hace desde una amplia avenida, pero no se hace por cajones de tiempos, lo que supone que todo el mundo lucha por ponerse delante. Nosotros no entramos en esa guerra, y no pusimos donde encontramos un hueco, y eso fue bastante retrasados, junto al globo de las dos horas. 

Una vez tomada la salida, empezamos a sufrir el hecho de salir tan retrasados, ya que nos encontramos con muchos corredores con un ritmo bastante más lento que el nuestro, eso suponía tener que correr buscando huecos para adelantar, tener que acelerar, frenar, buscar de nuevo el hueco para pasar, y así prácticamente durante todo el primer kilómetro. Menos mal, que este recorrido se hace por una amplia y larga recta que ayudaba a adelantar, pero aún así, empezamos la carrera a ritmo de 5:18 min/km. 


El segundo kilómetro nos deparaba una pequeña trampa, y es que había que cruzar el río Pisuerga, y el puente por el que lo hicimos estrechaba el recorrido, con respecto a la amplitud que teníamos anteriormente, así que tocó adecuar el ritmo al grupo. Por suerte el puente no era muy largo, y pronto se volvió a ampliar el ancho de la carrera. 

Ya en el cuarto kilómetro nos encontramos la única dificultad del recorrido, en lo que a cuestas se refiere, como he comentado anteriormente pasábamos por debajo de la N-601, lo que supuso una primera bajada, de bastante desnivel en muy pocos metros, para a continuación subir y recuperar la altimetría inicial, la carrera continuaba unos cientos de metros, hasta que hacíamos un giro de 360º, y volvíamos a hacer el recorrido anterior, en dirección contraria, de nuevo bajando y subiendo por debajo del puente. Por el PK5 pasamos con un tiempo de 25´18”, a un ritmo de 5:04 min/km. 

 
Gran parte del kilómetro seis lo hicimos en paralelo al río Pisuerga, y ya pasado el PK6, volvimos a cruzar el río, aunque en esta ocasión por un puente más amplio que el del kilómetro dos. Al final de ese puente, chute de energía, ya que se encontraba mi mujer con el peque animándonos. 

Tras una larga recta, que de nuevo iba en paralelo al río Pisuerga, pero ahora en la otra orilla, llegamos al PK7, donde giramos a la derecha, entrando en el casco antiguo de Valladolid, pasando en algunos casos por zonas adoquinadas, y junto a edificios emblemáticos de la ciudad como la iglesia de San Pablo. En esta zona el ancho de la carrera se estrechaba, pero por otro lado empezaba a haber más animación, que los kilómetros que hicimos por la otra orilla del río. 

Y de esta forma volvíamos a la salida, aunque no pasábamos exactamente por la misma zona de salida, sino por la paralela, y encarábamos la segunda vuelta. Por el PK10 pasamos con un tiempo de 48´46”, a un ritmo de 4:53 min/km. Este segundo tramo de cinco kilómetros lo hicimos en 23´28”, a un ritmo de 4:42 min/km. 

 
Como la vuelta no pasaba exactamente por la línea de salida, en la segunda vuelta los kilómetros no coincidían exactamente, es decir, el PK1 no coincidía con el PK11, el PK2 no coincidía con el PK12… Otra diferencia con respecto a la primera vuelta, es que ya no había el tapón que sufrimos en el primer kilómetro, por lo que se podía correr con mucha más fluidez. 

Las sensaciones de carrera hasta ese momento eran bastante buenas, cierto que no notaba la chispa de cuando hice el Movistar Medio Maratón de Madrid, pero sí me notaba con buen ritmo, y había llevado bastante bien el ritmo de los kilómetros cinco al diez. Comentar que había bastante humedad el día de la carrera, y en el avituallamiento del PK10 aproveché y me tomé una pastilla de sales. 


A pesar de esas buenas sensaciones, no pude evitar que se me atragantará un poco el paso por el puente de la N-601, sobre todo el segundo paso, el primero fue bien, pero tras el giro de 360º y volver a encararme, se me atascó la subida, y mi compañero se me escapó un poco, aunque un poco más adelante frenó el ritmo y yo lo aceleré, y pronto nos volvimos a juntar de nuevo. Por el PK15 pasamos con un tiempo de 1h12´57”, a un ritmo de 4:52 min/km, haciendo este tramo de cinco kilómetros en 24´11”, a un ritmo de 4:50 min/km. 

Lo que quedaba de carrera fue “raro”, por un lado empezaba a notar las piernas cargadas, pero en cambio el ritmo era bastante bueno, en ese momento agradecí llevar compañía, ya que posiblemente si hubiese ido solo, habría tendido a frenar el ritmo, pero al ir con mi compañero, no le pedí frenar el ritmo, sino que me forcé a seguir su ritmo. Por el PK20 pasamos con un tiempo de 1h36´24”, a un ritmo de 4:49 min/km, haciendo el tramo entre el PK15 y el PK20 en 23´27”, a un ritmo de 4:41 min/km. 



Ya solo nos quedaba dar la vuelta al Campo Grande para encarar la línea de meta, la cual la cruzamos con un tiempo de 1h41´32”, a un ritmo de 4:49 min/km, dentro del margen que me había marcado al iniciar la carrera. 

El Medio Maratón de Valladolid, como test de cara al Maratón de Chicago me ha dejado un buen sabor de boca, lógicamente noté las piernas cargadas, y con menos chispa que hace unos meses, pero a pesar de correrlo dentro de un plan para maratón, el tiempo ha estado cerca de mis mejores marcas, y las sensaciones en carrera han sido lo suficientemente buenas, como para ser optimistas de cara al maratón. 


lunes, 23 de septiembre de 2019

Chicago, mi tercer major. Undécima semana de entrenamiento

Esta semana era de las importantes en el plan de entrenamientos, no ya por los entrenamientos que tenía que realizar, sino, porque tenía planificado hacer un test en carrera, importante para ver cómo va asimilando el cuerpo los entrenamientos, y como respondía en carrera. 

Llevaba sin ponerme un dorsal para una carrera (no tengo en cuenta La Penitencia de los Austrías, ya que no fue una carrera como tal), desde mediados de junio, y después de eso tuve un periodo de descanso, tras el cual empecé con el plan de entrenamientos, por tanto eran más de tres meses sin hacer una carrera, solo entrenamientos. 

Cuando llevo tiempo sin competir, llegado el momento, llego a la línea de salida con dudas, por la carga de entrenamientos, y la carga de kilómetros que eso supone en las piernas, por el ritmo a llevar, por cuanto aguantaré un ritmo más rápido que el planeado para el día del maratón… Lo bueno es, que por lo general, la dudas que tienes en la cabeza, las piernas tardan poco en despejarlas, y responden bastante bien. 

La semana una vez más, estuvo complementada con los ejercicios de fortalecimiento de core, estiramientos y de foam roller, y además el martes aproveché para ir al gimnasio y hacer también ejercicios de fortalecimiento de las piernas, y también aproveché para ir el jueves a las termas, y hacer un recorrido sobre todo por las piletas de agua fría y caliente. 

Por otro lado, esta semana ha sido el sorteo para el Maratón de Tokyo 2020, casi 300.000 inscritos y solo 30.000 dorsales, y no he tenido la suerte de que me tocase uno de ellos, así que Tokyo tendrá que esperar por lo menos a 2021. 

Y ahora paso a contaros los entrenamientos de esta semana. 

Día 1.11- 8 kilómetros de rodaje entre 5´55” y 5´20”. 

Sesión de rodaje suave, dejando a las piernas llevar el ritmo, metiendo algo de recorrido por cuestas, pero intentando no ser muy exigente. 

Tras ese pequeño rodaje, entré al gimnasio y estuve haciendo ejercicios de fortalecimiento de piernas, en maquina, con el bosu y con mancuernas. 

 
Día 2.11- Calentamiento 10´, cambios de ritmo 6´rápido + 5´ lento + 4´ r + 3´ l + 2´ r + 1´ l +2´ r + 1´ l + 2´ r, enfriamiento 5´. 

Este día tocó sesión doble, primero completé la sesión de cambios de ritmo que fijaba el plan del maratón, con una sensación agridulce, y es que notaba que iba forzando y a un ritmo rápido, pero el Garmin no me marcaba lo mismo, de hecho una de las series de 2 minutos me marcó un ritmo de 5:02 min/km, y mi sensación para nada era esa, sobre todo teniendo en cuenta que la siguiente serie rápida de 2 minutos, me salió a 4:26 min/km, y no noté tanta diferencia entre una y otra.

Tras esta sesión, me uní al grupo de Adidas Runners, donde hice técnica de carrera, y un rodaje de 6 km, con cambios de ritmo de 2 minutos rápido, 2 minutos lento. 

 
Día 3.11- Medio Maratón de Valladolid 

Entrenamiento con dorsal, en el que como comenté la semana pasada, la idea era estar entre 1h40´ y 1h43´, y a pesar de las dudas que tenía en la cabeza antes de tomar la salida, una vez en carrera conseguí estar dentro de ese intervalo, y tener bastante buenas sensaciones a lo largo del recorrido, aunque si que es verdad, que hubo momentos en los que quise ir más rápido y noté las piernas algo cargadas, y sin la chispa deseada, algo que creo que es lógico, tras once semanas de entrenamiento. 

 
La nueva semana empieza con una visita al fisio para que me haga un masaje de descarga, para poder afrontar lo que queda de plan, y sobre todo el maratón, en las mejores condiciones posibles. También empiezo a descargar de kilómetros las tiradas largas, aunque las otras dos sesiones aún mantendrán un cierto nivel de kilómetros. 


lunes, 16 de septiembre de 2019

Chicago, mi tercer major. Décima semana de entrenamiento

Cuando planificáis vuestros entrenamientos de cara a un reto, ¿sois conformistas o exigentes? En mi caso, en esta ocasión debo decir que he sido bastante exigente con el plan, tomando como base el plan del Maratón de Valencia de 2017, donde hice mi mejor marca, le he hecho cambios a las sesiones de entrenamiento, y además he apretado un poco más las tuercas en cuanto a ritmos. Eso conlleva exigir más a las piernas y, como me está pasando, a veces no llegar a cumplir con los ritmos marcados, por lo que es importante tener los pies en el suelo, y no infravalorar el trabajo que estoy haciendo. 


Tras las vacaciones, parece que por fin he podido entrar en una dinámica buena, y empiezo la semana con los ejercicios de fortalecimiento de core, estiramientos y de foam roller. Pero por otro lado, no consigo entrar en la dinámica de los ejercicios de fortalecimiento de las piernas, ya que al final me está faltando el momento para ir al gimnasio, aunque por otro lado, esta semana la sesión de rodaje se complementaba con series en cuestas, que siempre ayuda a fortalecer. 

La rutina también empiezo a asentarla con los entrenamientos de Adidas Runners, aunque de momento, tengo que complementar parte del entrenamiento en solitario. Si la semana pasada tuve que hacer unos kilómetros aparte de los que hice con el grupo de Adidas Runners, esta semana lo que ha tocado hacer es complementar el rodaje con la serie de cuestas en solitario, lo cual tampoco me supuso un problema, ya que pude hacerlas en una cuesta cercana al lugar donde quedamos para el entrenamiento de Adidas Runners. 

Por otro lado, semana de cambio de temperatura, que ha hecho que los entrenamientos fueran menos sufridos ya que la temperatura era bastante idónea para correr, excepto en la tirada larga, donde tuve la compañía de la lluvia durante varios kilómetros. 

Y ahora paso a contaros los entrenamientos de esta semana. 

Día 1.10- Calentamiento 2 kilómetros, series 7x400 + 7x300 + 5x200, enfriamiento 2 kilómetros. 

Sesión de series, en esta ocasión de series cortas, de las que te dejan las piernas ardiendo, y el lactato a flor de piel. 

En esta sesión ya se notó la bajada de la temperatura, casi veinte grados menos que en las sesiones que hice en mi pueblo, y esa bajada de temperatura, se nota mucho en las piernas, ya que no tenía la sensación de pesadez de las anteriores semanas. 

Respecto a ritmos, sigo más lento que lo que me he marcado, pero bastante contento, sobre todo por las sensaciones de las piernas. 


Día 2.10- 10 kilómetros de rodaje entre 5´55” y 5´20”, más series en cuesta 2x4x45” 

En esta sesión, lo primero fue hacer las series en cuestas, hice un pequeño calentamiento, y me dirigí a una cuesta cercana al punto de encuentro de Adidas Runners. 

La idea era hacer las series en cuestas a un ritmo de 4:30 min/km, y el ritmo de la primera serie fue de 4:35 min/km, y el de la segunda serie de 4:20 min/km, así que bastante contento. 

Luego tocó hacer el rodaje, y para ello nos juntamos cinco compañeros de Adidas Runners, dos de ellos están preparando el Maratón de Valencia, otra está preparando el Maratón de Berlín, otro chico que le venía bien nuestro ritmo, y yo. Pusimos un ritmo cómodo en el que íbamos hablando, contando anécdotas, consejos, y al final acabamos el rodaje de 10 kilómetros a un ritmo cercano a los 5 min/km. 

Está claro, que nada como compartir kilómetros, para que estos sean menos sufridos. 


Día 3.10- 22 kilómetros a ritmo progresivo, 5 km de 5´50” a 5´20”, 12 km de 5´20” a 5´05” y 5 km de 5´05” a 5´. 

Posiblemente la sesión más sufrida de la semana, debido a la climatología (nunca estamos contentos, jejeje), y es que el fin de semana ha estado lloviendo gran parte del tiempo, y tocaba asumir que me iba a mojar. 

Lo malo del clima que tenemos ahora es que es complicado saber que ponerte, yo salí con camiseta y un cortavientos, que por momentos me sobraba, y me quitaba, para poco después tener que ponérmelo de nuevo. 

Empecé la sesión con algo de sol, para posteriormente nublarse y empezar a llover, la lluvia me acompañó durante unos seis kilómetros, para de nuevo dejar paso a un claro y al sol. Me quité el cortavientos, pero ya iba completamente empapado, y me tocó hacer unos diez kilómetros más con la ropa mojada, lo cual resultaba bastante incómodo. 

Respecto a los ritmos, como la semana anterior, bien al principio, cerca del ritmo rápido, la segunda parte, fue un poco una montaña rusa, de repente me encontraba bien, que de repente me iba fuera de ritmo, para acabar el último tramo, de nuevo fuera de ritmo, y algo cargado. 


La siguiente semana del plan la tengo marcada en rojo, ya que llega el test del Medio Maratón. Llevo sin competir todo lo que llevo del plan, por lo que ponerme un dorsal en un Medio Maratón será importante para ver cómo van las piernas en carrera. En teoría debería estar entre el 1h40´, y 1h43´, siempre que me mueva dentro de ese intervalo será positivo de cara al Maratón de Chicago. 


lunes, 9 de septiembre de 2019

Chicago, mi tercer major. Novena semana de entrenamiento

Tras el parón de una semana en el plan de entrenamientos por las vacaciones en la playa, aunque como ya conté no fue parón de correr, he retomado el plan de entrenamientos, y ya sin ninguna parada más (o por lo menos eso espero), llegaré hasta la línea de salida del Maratón de Chicago, del cual a día de hoy me separan cinco semanas.



Esta semana he vuelto a retomar los ejercicios de fortalecimiento de core, además de una sesión específica de estiramientos y de foam roller, para intentar descargar los puntos gatillo y relajar los músculos. Los trabajos de fortalecimiento de las piernas los sigo haciendo metiendo cuestas en los recorridos, y es que aunque el maratón de Chicago es llano, siempre es bueno hacer cuestas, para fortalecer las piernas.

También esta semana han vuelto los entrenamientos de Adidas Runners, y han vuelto con una novedad muy interesante, y es que todas las semanas harán un día de rodaje, en torno a 10 kilómetros, y eso me viene muy bien, ya que puedo encajarlo dentro del plan del maratón.

Por otro lado, esta semana he tenido la visita de un mal acompañante, el asma, en dos de las tres sesiones me ha dado un ataque de asma, lo cual es poco o nada compatible con correr, así que en esas dos ocasiones tuve que parar, hasta recuperar bien la respiración. El que, como yo, sufra de asma, me entenderá perfectamente.

Y ahora paso a contaros los entrenamientos de esta semana.

Día 1.9- 15´calentamiento, cambios de ritmo 2 x (5000 rápidos + 2000 lentos), 5´ enfriamiento.

Esta semana adelanté la sesión de series, en este caso cambios de ritmo, del jueves al martes, ya que el jueves volvía a los entrenamientos de Adidas Runners.

La sesión empezó bien, con el ritmo dentro de lo planeado, hasta que llegué al segundo 5000 rápido, ya que al pasar del ritmo lento al rápido, empecé a notar que la respiración no era fluida, poco a poco la sensación fue peor, y el ataque de asma era un hecho. Bajé un poco el ritmo, para intentar respirar mejor, pero fue imposible, así qué cuando llevaba unos 3000 metros de los 5000, tuve que parar, y de este modo intentar recuperar la respiración y que se pasase el asma.

Una vez lo conseguí, retomé el entrenamiento, haciendo lo que me quedaba de sesión, aunque desde luego, ese ataque de asma, hizo que el ritmo final no fuese el deseado.


Día 2.9- 14 kilómetros de rodaje entre 5´55” y 5´20”.

Primer entrenamiento de la nueva temporada con Adidas Runners, en este caso se trataba de un rodaje de entre 8 y 10 kilómetros por la Casa de Campo, haciendo un recorrido que incluía la subida a Garabitas.

Llegué antes al entrenamiento, y por mi cuenta hice 4 kilómetros, y luego me uní al grupo que haría Garabitas a un ritmo entre 5 y 5:15 min/km, y como al final se quedó corto el recorrido, junto a una compañera que está preparando el maratón de Berlín, continuamos el entrenamiento, y cumplí con los kilómetros marcados en el plan.

Lo malo del entrenamiento, es que casi acabando Garabitas me volvió a dar el asma, pero en esta ocasión llevaba conmigo el inhalador, por lo que me eché a un lado, y me lo tomé, pudiendo acabar el entrenamiento en buenas condiciones.


Día 3.9- 22 kilómetros a ritmo progresivo, 5 km de 5´50” a 5´20”, 12 km de 5´20” a 5´05” y 5 km de 5´05” a 5´.

Después de las tiradas largas fuera de mi localidad, con los inconvenientes que esto supone, volvía a hacerlas en un terreno que tengo más controlado a la hora de poder hacer recorridos largos.

Tenía pocas opciones para hacer el entrenamiento, ya que un compromiso me impedía hacerlo el sábado por la tarde, y el domingo iba a participar en una carrera, por lo que la opción era hacer la sesión el sábado por la mañana. Lo mejor de todo fue un descenso de la temperatura, que hizo que el entrenamiento fuera menos sufrido que, por ejemplo, en mi pueblo, donde fue con 35º.

Los primeros kilómetros, muy bien, dentro del ritmo, pegado al ritmo más rápido, el segundo tramo, también bastante bien, dentro del ritmo y más cerca del rápido que del lento. Lo malo fue el tercer bloque, que las piernas no respondieron como debían, y nunca conseguí estar dentro del ritmo marcado, sufriendo más de lo esperado, y haciendo que el entrenamiento lo acabase con malas sensaciones, a pesar de lo bien que me encontré en los bloques uno y dos.


La semana la acabé con una carrera un tanto atípica, primero porque era gratuita, y segundo porque se trataba de una especie de trail urbano, que se desarrollaba por el Madrid de los Austrias, subiendo y bajando escaleras, cuestas, calles estrechas de adoquines, y zonas muy bonitas del Madrid antiguo. Carrera que hice junto a dos amigos, a un ritmo muy, muy tranquilo, y que hizo que no sufriésemos demasiado, y que pudiésemos ir hablando y disfrutando del recorrido.


Y así finiquitamos una semana más de entrenamientos, con un sabor de boca amargo por los dos ataques de asma, y por el final de la sesión larga, pero que vista en números, ha sido una semana cargada de kilómetros, y en general dentro de los ritmos marcados.


miércoles, 4 de septiembre de 2019

Chicago, mi tercer major. Séptima y octava semana de entrenamiento

Parada a la hora de publicar los entrenamientos, debido a las vacaciones, lo cual no significa que en ese tiempo no haya seguido con los entrenamientos del plan y sumando kilómetros, hasta llegar a 219,97 kilómetros en el mes de agosto, lo cual, para mí es una barbaridad, sobre todo tratándose del mes que es, agosto, que suele ser un mes de parón, pero que yo llevo ya tres años haciendo bastantes kilómetros, 161,68 kilómetros en el 2017, 222,40 kilómetros el 2018, y los mencionados 219,97 kilómetros en 2019. 



A las dos semanas de entrenamientos, hay que sumarle una tercera semana que ha coincidido con las vacaciones en la playa, donde este año he decidido desconectar del plan, y aunque he salido a correr, ha sido sin plan, solo para mantener las piernas activas. Lo malo de estas semanas en las que he tenido que hacer las sesiones del plan, ha sido por un lado, el calor que me ha acompañado en mi pueblo, y por otro, el correr por lugares donde sacar kilómetros es complicado, y donde acabo haciendo kilómetros por calles estrechas, caminos, e incluso carretera. 

Con el paso de estas semanas hemos pasado el ecuador del plan, y ya me encuentro a menos de seis semanas del Maratón de Chicago, más o menos 39 días, para seguir entrenando, fortaleciendo y trabajando cuerpo y mente para enfrentarme a mi octavo maratón. 

En estas semanas de vacaciones otro de los problemas, a pesar de tener más tiempo libre, es sacar tiempo para hacer ejercicios de fortalecimiento, core, y estiramientos. Tenía planeado hacer ejercicios en estas semanas, pero la verdad es que no los hice ni un solo día, y lo que es peor, muchas veces acababa y ni siquiera estiraba. Así, que estas seis semanas toca intentar recuperar el tiempo perdido. 

Y ahora paso a contaros los entrenamientos de estas semanas. 

Día 1.7- 10 kilómetros de rodaje entre 5´55” y 5´20”, más cuestas 2 x 5 x 55” 

Sesión de rodaje más cuestas, aún en Alcorcón, en la que como en anteriores ocasiones hice un rodaje de casi seis kilómetros hasta la zona donde se encuentra la cuesta en la que entreno, donde realicé las diez series en cuesta, que como es habitual, me deja las piernas cargadas, pero con muy buen ánimo. 

Y tras ello, vuelta a casa, haciendo en torno a cuatro kilómetros, para acabar de cumplir con los 10 kilómetros de rodaje. 


Día 2.7- Calentamiento 20´, cambios de ritmo 3 x (3 km rápidos + 1 km lento), enfriamiento 5´. 

Primer entrenamiento estando de vacaciones, que hice en Ciudad Rodrigo, en un circuito que alternaba cuestas, con terreno llano. 

Como está siendo habitual en este plan, el ritmo rápido me salió unos segundos más lento de lo que tenía planeado, mi idea era hacerlo a un ritmo de 4:48 min/km, pero los ritmos salieron en 4:54 min/km, 4:57 min/km y 4:56 min/km. 


Día 3.7- 20 kilómetros a ritmo progresivo, 5 km de 5´50” a 5´20”, 10 km de 5´20” a 5´05” y 5 km de 5´05” a 5´. 

Esta fue una de esas sesiones que vas más pendiente de qué ruta hacer, y de ir con cuidado, que del ritmo que llevas, por lo que opté por sumar kilómetros, y sobre todo no tener ningún percance. 

Y es que a lo largo del entrenamiento tuve que ir por calles estrechas casi sin acera, camino pedregoso, cruce de carreteras, e incluso hacer bastantes kilómetros por carretera, para poder sumar los kilómetros del entrenamiento. 




Día 1.8- 14 kilómetros de rodaje entre 5´55” y 5´20”. 

Sesión de rodaje más, en esta ocasión en Montilla, donde el peor enemigo para esta sesión fue el calor, salí a correr cerca de las nueve, y aún así me encontré con 34º, lo que hace muy complicado correr a un buen ritmo. 


Día 2.8- Calentamiento 3 km, series 2 x (2 km + 3 km), enfriamiento 2 km. 

Sesión de series, de nuevo saliendo cerca de las nueve de la noche, y en esta ocasión con 33º, de nuevo, el calor como mal aliado para intentar llevar buenos ritmos. 

Las series las hice en un circuito urbano, con un poco de todo, subidas, bajadas y llano, que tenía una longitud de algo más de 1,5 km. 

Respecto a ritmos, lo de siempre, unos segundos peor de lo planificado, las series de 2 km quería hacerlas a 4:44 min/km, y me salieron a 4:48 min/km y 4:54 min/km, y las series de 3 km, quería hacerlas a 4:48 min/km, y me salieron a 4:55 min/km y 4:58 min/km. 


Día 3.8- 20 kilómetros a ritmo progresivo, 5 km de 5´50” a 5´20”, 10 km de 5´20” a 5´05” y 5 km de 5´05” a 5´. 

En mi pueblo me es más fácil hacer esta sesión larga que en Ciudad Rodrigo, ya que apenas tengo que hacer kilómetros por zonas estrechas, todo lo hago por asfalto, y salvo tener que cruzar una carretera, el resto lo hago por circuito urbano, sin mayores riesgos. 

Lo malo, de nuevo fue el calor, otra vez salí cerca de las nueve de la noche, y en esta ocasión me encontré con 35º. Durante la mayor parte del entrenamiento pude ir dentro de los ritmos marcados por el plan, si bien, más cerca de los ritmos lentos que de los rápidos, hasta el último tramo, donde el calor ya hizo mella, y el ritmo no salió dentro de lo marcado por el plan. 




Y tras esto, llegó la semana en la playa, donde dejé de lado el plan, para relajarme, y correr sin la presión del plan, de los kilómetros y los ritmos, simplemente me propuse hacer en esos días unos 10 kilómetros en cada salida, y en un ritmo entre 5´55” y 5´20”, así que aproveché el paseo marítimo e hice tres salidas a correr a lo largo de esa semana. 

Día 1.- Rodaje 10 kilómetros a ritmo entre 5´55” y 5´20”. 

Día 2.- Rodaje 10 kilómetros a ritmo entre 5´55” y 5´20”. 


Día 3.- Rodaje 10 kilómetros a ritmo entre 5´55” y 5´20”. 




Y así han transcurrido los entrenamientos de las dos últimas semanas, más los de la semana de rodajes fuera del plan. Ahora toca retomar el plan, pensar solo en el maratón, intentar ir mejorando los ritmos, a ver si soy capaz de recortar esos segundos de más que me salen siempre, y sobre todo empezar a compaginar el correr con el trabajo de fortalecimiento y core.