miércoles, 8 de junio de 2016

El flato, ¿por qué se produce y cómo prevenirlo?

Estoy casi seguro que el 100% de los que vais a leer este post habéis sentido alguna vez flato, podríamos decir que, junto con las agujetas, es una molestia de la que no se ha librado ninguna persona que haya practicado deporte, ya sea a nivel popular o profesional. Todos, alguna vez, hemos sentido mientras corríamos ese dolor punzante y molesto en el abdomen, que nos hace pasar un mal rato y que en ocasiones puede llegar a hacer incluso que paremos, aunque por suerte, esta molestia no pasa de ahí, es una molestia benigna que no tiene ningún mal reflejo en nuestra salud.

Foto: sportadictos.com
Así pues, todos hemos sufrido y sabemos que es el flato, ahora bien, ¿sabemos por qué se produce el flato?, pues la respuesta, después de leer varios artículos, algunos de ellos incluso con estudios médicos, es que no, nadie puede afirmar con seguridad porqué se produce el flato, existen distintas teorías, pero en ninguna de ellas sus autores indican que el flato se produzca así a ciencia cierta.

A continuación paso a indicaros algunas de las teorías que los expertos manejan para explicar la aparición del flato:

Oscilaciones de la carrera

El estómago y el diafragma, principal músculo respiratorio, están unidos por ligamentos, en cada impacto de nuestra carrera nuestros órganos internos se desplazan hacia abajo, mientras que el diafragma se mueve hacia arriba para expulsar el aire, por lo que los ligamentos se tensan, y es por ello que sentimos ese dolor entre el diafragma, el pecho y el abdomen. Esta teoría además explicaría porqué en deportes como el ciclismo o la natación no se sufre tanto flato, ya que no se dan las oscilaciones que se dan en la carrera, o porqué cuando comemos o bebemos mucho sufrimos más flato, y es que al estar el estómago lleno, su peso es mayor, y también las oscilaciones.

Rigidez de la musculatura

Otra de las posibles explicaciones es que los músculos que estabilizan la columna estén muy tensos, generando el dolor punzante bajo el diafragma.

Falta de flujo sanguíneo

Esta teoría se basa en el hecho de que cuando hacemos deporte gran parte de nuestra sangre se envía a los músculos que están trabajando en ese momento, esto provoca que se dirija menos sangre a nuestro diafragma, lo que originaría la fatiga muscular, ya que llega menos oxígeno y con ello el flato. Esta teoría, al igual que la primera, también explicaría porqué somos más propensos al flato cuando comemos o bebemos mucho, y es que el estómago demandaría más flujo sanguíneo para hacer la digestión, provocando la falta de flujo en el diafragma.

Sobrecarga del estómago

La última teoría también tendría que ver con la ingesta de comida y/o bebida, y es que al llenar el estómago, este va a rozar con el peritoneo, que es la membrana que cubre la superficie del abdomen, y esto provocaría la irritación del peritoneo y con ello el dolor punzante o flato.

Como podéis ver hay todo tipo de teorías, por lo que es difícil saber exactamente porqué se produce el flato, pero sí hay una conclusión en la que están de acuerdo los expertos, y es que la ingesta de comida y/o bebida antes o durante la práctica deportiva aumenta la probabilidad de que durante nuestro entrenamiento nos entre flato.

La pregunta de cómo evitar el flato, tiene una difícil respuesta, y es que, ¿cómo evitamos algo, que no se sabe a ciencia cierta cómo se produce?, aun así los expertos nos dan una serie de pautas para prevenir la aparición del flato:

No comer ni beber inmediatamente antes de practicar deporte, para que de esta forma nuestro estómago tenga menos peso, y no haya tanto flujo sanguíneo hacía el estómago.
Al correr, y más en días calurosos hay que hidratarse, por lo que es necesario beber algún líquido que nos hidrate, en ese caso debemos beber a sorbos pequeños.
- Minimizar las oscilaciones que se dan cuando corremos, para ello debemos tener una buena técnica de carrera, correr más relajados en las cuestas abajo, y tener un buen calzado que amortigüe los impactos.
Trabajar la respiración y los músculos respiratorios, para no tener falta de oxígeno ni de flujo sanguíneo.
Hacer trabajos de fortalecimiento de la zona del core, ejercicios de abdominales y lumbares son muy favorables.
Evitar las bebidas con alta concentración de azúcar entre una y dos horas antes de la práctica deportiva.

Y, ¿qué pasa si no hemos podido evitar el flato, y sentimos esa terrible punzada en nuestro abdomen?, pues en ese caso lo mejor es:

Tensar la zona abdominal, para de esa forma evitar las oscilaciones.
- Presionar con la mano la zona donde sintamos la punzada, flexionar el tronco ligeramente y espirar con fuerza.
Bajar el ritmo, o incluso si la punzada es muy fuerte dedicarnos solo a caminar, hasta que el dolor pase.
Controlar el ritmo de la respiración, espirar cuando la pierna contraria al lado que nos duele impacte con el suelo. Si nos duele el lado derecho, espirar cuando la pierna izquierda impacte con el suelo, y viceversa, así lograremos que los órganos internos y el diafragma se muevan acompasados.

Así pues esto es lo que puedo contaros de nuestro amigo el flato, nada del todo seguro, salvo que comer y beber justo antes de practicar deporte no es muy recomendable, y que como dije al principio de la entrada, junto con las agujetas, todos lo hemos sufrido.

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