miércoles, 4 de mayo de 2016

No dejes de correr por la alergia

Una vez pasado el invierno, el virus de la gripe parece desaparecer, y con suerte nos olvidaremos de ella hasta el mes de octubre o noviembre. Ahora con la primavera, los rayos de sol predominan en los días, que poco a poco se van haciendo más largos, los árboles vuelven a tener hojas, florecen las plantas, y... aparece el polen, es decir, la primavera nos trae otro tipo de molestias, como son las alergias. Es una época en la que el asma, la rinitis, los ojos llorosos, la garganta reseca y los estornudos empiezan a acompañar a muchos de nosotros, y como contrapartida aparecen los antihístamínicos, los inhaladores y los kleenex.

Imagen de Knowi.es
Está claro que las alergias no son exclusivas de la primavera, pero sí que es cierto que es en esta época en la que el número de alérgicos se multiplica. En mi caso, soy un alérgico tardío, ya que no tuve ningún síntoma hasta pasados los treinta años, y se ve que como llegué tarde a esto de las alergias, pues la pillé con ganas y tengo alergia y asma todo el año, por lo que la llegada de la primavera no me afecta más. Mi alergia es muy leve, y con un antihistamínico a diario, evito los estornudos, los ojos llorosos y el moqueo. El tema del asma es distinto, viene cuando quiere, no tiene un patrón fijo, y es una sensación bastante angustiosa, normalmente empieza con una tos seca y unos silbidos en el pecho cuando respiro, a partir de ahí siento que por más que inspiro, no consigo el oxígeno que mis pulmones demandan, así que me toca tirar de una dosis de Seretide para volver a la normalidad. Por suerte a día de hoy nunca me ha dado asma mientras entreno o corro, en cambio sí he tenido síntomas de asma sentado en el sofá o tumbado en la cama.

Mi caso, por lo tanto no es preocupante, nuca me ha impedido salir a correr, pero hay personas a las que los síntomas de sus alergias no son tan llevaderos y tienen que cambiar su rutina de salir a la calle por correr en cinta, hacer ejercicios en interior o incluso parar sus entrenamientos, también hay otras personas a las que los estornudos, los ojos llorosos o el moqueo, no les impide seguir con su rutina de carreras o entrenamientos.

Sin duda, para los que hemos estado corriendo al aire libre durante los duros meses de otoño e invierno, tener que encerrarte ahora en un gimnasio para correr es bastante frustrante, pero también es indudable que correr con los síntomas de la alergia no es lo más agradable, aunque esto no quiera decir que sea imposible, pero ¿qué se puede hacer para no abandonar nuestra rutina y no tener que cambiar el correr al aire libre por los espacios cerrados?, a continuación os dejo una serie de consejos.

- Lo primero es ser consecuente, la alergia no te impide correr, pero si hará que no te encuentres al 100%, por lo que tus entrenamientos deberán ser menos exigentes.
Si tu alergia te produce asma, recomiendan que tomes una dosis de tu inhalador antes de salir a correr. En mi caso debo decir que esto rara vez lo he hecho, solo en carreras esporádicas en las que me he visto algo nervioso, previniendo de esta forma que los nervios se traduzcan en un ataque de asma. Si es recomendable llevar a mano tu inhalador por si acaso…
- En estos casos es fundamental realizar un buen calentamiento, de esta forma ayudaras a tu cuerpo a marcar el ritmo respiratorio.
- Evita correr si el ambiente está muy seco, y sobre todo evita correr por lugares donde haya un mayor nivel de polen como son los parques y zonas ajardinadas. Asúmelo, tendrás que correr más por el asfalto. Si no puedes evitar estos lugares o correr en días secos, puedes utilizar una mascarilla para evitar que los factores alérgenos entren en tus vías respiratorias.
Si has tenido un día duro y estás cansado, es mejor dejar el entrenamiento para otro día,  ya que la fatiga disminuye nuestras defensas, y estaremos más expuestos a los síntomas de la alergia.
Si la alergia te ataca a los ojos, unas gotitas de suero y unas gafas de sol te serán de ayuda.
Al amanecer o al atardecer es cuando mayor concentración de polen hay, por ello deberías evitar correr a esas horas.
Los días primaverales de lluvia son los mejores para salir a correr si eres alérgico, tanto mientras llueve como después de llover.
- Por el contrario los días de viento deberías evitar salir a correr, ya que éste esparce el polen y provocará que las vías respiratorias se vean más afectadas.
Si ves que te agotas demasiado o que tienes pitos al respirar, debes dar por terminado tu entrenamiento, pero realizando una vuelta a la calma de forma pausada, no parando de golpe.
Una vez terminado el entrenamiento o carrera, es muy importante darse una ducha y cambiarse de ropa, la cual irá directamente a la lavadora.

Estos son unos consejos que pueden ayudarnos a correr al aire libre, a pesar de que seamos alérgicos, pero como siempre os digo en estos casos, lo importante son vuestras sensaciones, que el entrenamiento lo hagáis con cabeza, y sobre todo que si sentís síntomas alergénicos visitéis a vuestro médico o especialista, que será quien os podrá hacer un diagnóstico y recetar si fuese necesario los antihistamínicos o inhaladores necesarios.

2 comentarios:

  1. Consejos que me vienen como anillo al dedo... ¡Malditos alérgicos! :D

    Cuídate esa alergia, por leve que sea. Yo ando con medicamentos, la mía es algo más fuerte.

    ¡Fuerte abrazo! :)

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. La verdad que el tema de las alergias es un rollo, por poco que afecten... en mi caso Ebastel todas las noches, y el Seretide para el asma siempre va conmigo... que se le va a hacer, no queda otra.

      Cuídate también de tu alergia. Un abrazo!!

      Eliminar