Con el paso del tiempo, y según
más metido estás en el mundo del running, te vas dando cuenta que para correr
más y mejor, y sobre todo sin molestias y lesiones, no basta solo con correr. Los
kilómetros hay que complementarlos con trabajo de fortalecimiento, ya sea en
gimnasio, en casa o en la calle.
Desde muy pronto, recomendado
por mi cuñado, que como ya os he comentado en otras ocasiones es fisio y
entrenador personal, yo incluí una rutina de ejercicios de fortalecimiento en mis entrenamientos, posteriormente a esa
rutina, le he ido incluyendo otro tipo de ejercicios de fortalecimiento, como son los ejercicios excéntricos que también nos benefician a los runners.
A esta rutina de entrenamiento
para fortalecer, poco a poco he ido añadiendo otra serie de ejercicios, una vez
que he ido descubriendo la importancia del core a la hora de correr, así como también de los tobillos y de hacer trabajo de propiocepción.
En definitiva, al plantearnos
un plan de entrenamientos, sea de la distancia que sea, no debemos de olvidarnos
de incluir en él, trabajo de fortalecimiento. De nada nos va a servir hacer
kilómetros y kilómetros, conseguir una gran capacidad aeróbica y anaeróbica, si
después no gozamos de unas piernas y un core fuerte. Es por ello, que en mi
caso, incluyo dos días en el plan para hacer trabajo de fortalecimiento, en el
caso del plan que estoy realizando los suelo hacer después de la sesión de
rodaje, y el día del entrenamiento cruzado.
Y ahora paso a
contaros los entrenamientos de esta semana.
Día
1.- 11 kilómetros de rodaje a ritmo entre 5:55 min/km y 5:25 min/km, más
fortalecimiento.
Día complicado, primero porque
tuve comida de empresa, y eso siempre supone un extra a lo que como
habitualmente, al llegar a casa estaba agotado y me eché una pequeña siesta, y
por último, aunque salí a correr pasadas las ocho de la tarde, me encontré con
32 grados. El resultado de todo esto es que primero me costó muchísimo el salir
a correr, y una vez puesto, me costó muchísimo coger ritmo e ir cómodo, piernas
adormiladas, estómago lleno, y una tremenda sensación de pesadez. Así que opté
por no forzar en exceso, y hacer el entrenamiento al ritmo que me marcase el
cuerpo.
Ya en casa hice algunos
ejercicios de fortalecimiento, core y estiramiento.
Día
2.- 45 minutos de entrenamiento cruzado más fortalecimiento.
Nueva sesión de entrenamiento
cruzado que, de nuevo, hice en el gimnasio junto a mi mujer. Empecé con 25´ de
elíptica, para continuar con ejercicios de fortalecimiento de piernas en
máquina, core, flexiones y estiramientos, y luego 750 metros en la piscina
(unos 20 minutos).
Acabé la sesión en casa con el
foam roller.
Día
3.- 10 kilómetros con 15 repeticiones de cambios de ritmo de 200 metros a ritmo
4´30” a 3´50”, y 200 metros recuperando.
Parece que las piernas van
recuperando la chispa, y empiezan a adaptarse a ritmos más rápidos. Esta semana
tocaba cambios de ritmo corto, pero más explosivos, y las piernas se movieron
dentro de los ritmos marcados por el plan, así que acabé con una muy buena
sensación, aunque eso sí con las piernas bien calentitas. Para este entrenamiento
de nuevo opté por retrasar la hora de salida, y por llevar el cinturón de
hidratación.
Esta sesión la acabé en casa
con ejercicios de estiramientos.
Día
4.- 19 kilómetros, repartidos en 9 km a 5:35 min/km, 4 km a 5:30 min/km, 4
kilómetros a 5:25 min/km y 2 km a 5:20 min/km.
Una vez más, y va a ser tónica
habitual, primero día de piscina con la familia, y luego sesión de fondo. Y, de
nuevo, primeros kilómetros a ritmo tranquilo, sin terminar de coger el ritmo, y
con la sensación de piernas adormiladas, después, según van cayendo los
kilómetros, el ritmo va mejorando, hasta sentirme bastante bien, acabando el
entrenamiento con buenas sensaciones.
Ya en casa, sesión de estiramientos.
Día
5.- 6 kilómetros de rodaje a ritmo entre 5:55 min/km y 5:25 min/km.
Al igual que con la sesión de
fondo, este rodaje, como tónica habitual lo realizaré tras pasar el día en la piscina,
y lo normal será que consista en volver desde la piscina a casa corriendo. Este
día me noté bastante bien, lento al principio, cogiendo ritmo, pero acabé con
buen ritmo, y con las piernas pidiendo más, pero no les hice caso, y me frené,
que aún quedan muchas semanas de carga, y muchos kilómetros que meterle a las
piernas.
Tercera semana de carga de trabajo acabada, sigue costandome ponerme en marcha, sobre todo en la primera sesión de la semana, pero en general tengo buenas sensaciones, y no notó una excesiva carga en las piernas, que es lo que más miedo me daba con el nuevo plan, y la mayor carga de entrenamientos, respecto a lo que estoy acostumbrado.